jueves, 16 de febrero de 2012

Era Digital, Era Emocional.

Si, vivimos en la Era Digital o en la Sociedad de la Información, como queramos llamarle. El primer término hace referencia a los medios (tecnológicos, digitales, 2.0, etc.) que han facilitado que la sociedad esté hoy en día más conectada y más informada que nunca (de ahí el segundo término). Podríamos decir, por lo tanto, que la Sociedad de la Información es una consecuencia de la Era Digital, o quizás, que la Era Digital es el paso lógico que ha propiciado los medios y las tecnologías que la Sociedad ha estado demandando. En cualquier caso, lo que está claro, es que hemos entrado, desde hace unos pocos años, en una nueva etapa en la Historia de la Humanidad, en una auténtica revolución, a todos los niveles, que muchos equiparan, incluida yo, a lo que supuso la Revolución Industrial en su momento.

La inclusión de las nuevas tecnologías y de las redes sociales, etc. está cambiando por completo la manera de comunicamos, de relacionarnos, de compartir información y conocimientos, la manera de hacer negocios, de comprar, de pasar nuestros ratos de ocio… en definitiva, está cambiando nuestra manera de vivir.

Sin ir más lejos, y según el Informe de la Sociedad de la Información en España 2011 (Fundación Telefónica), estos son algunos de los datos más representativos que ilustran el gran cambio social por el que estamos pasando:

  • El 67,1% de la población es internauta, de los cuales el mayor crecimiento se ha producido entre personas de edad comprendida entre los 45 y los 54.
  • El 20% de los españoles accede a internet a través del móvil, frente al 11% europeo.
  • Hay un 28,5% más de usuarios de banda ancha móvil que fija.
  • El Smartphone ha superado al PC como terminal inteligente más vendido.
  • Los libros digitales han tenido un crecimiento de un 160% en edades comprendidas entre los 55 a 64 años respecto a 2010.
  • El 33,7% lee la prensa en formato digital.
  • El 76% de los universitarios consideran los dispositivos móviles como los equipos tecnológicos más importantes en sus vidas.
  • La mayoría considera el acceso a internet como un recurso fundamental como el aire, el agua, la comida o la vivienda.
  • Cada vez más usuarios hacen uso combinado de tecnologías digitales.
  • La comunicación entre personas se vuelve cada vez más multicanal, 4,2 canales de media.
  • El comercio electrónico ha crecido un 23,1%.
  • Cada vez es más habitual el concepto ROPO (Research online and Purchase Offline).
  • Se afianza el uso social de internet para compartir experiencias relacionadas con la salud.


Todos estos datos y cifras no son sino la consecuencia de la evolución y la velocidad exponencial con la que accedemos y compartimos la información, la cual está pasando a tener dos valores clave hoy en día: la inmediatez y la democratización.

Ahora todo se comparte, todo se sabe, todo se consulta, todo se comenta, todo se recomienda, todo se critica, … Ya (casi) nada ni (casi) nadie se queda a salvo de quedar “retratado” en algún momento dado y por siempre en “la red”. La información fluye a raudales, estamos desbordados de información, saturados, diría yo… Y en medio de todo esto, de tantos datos, cifras, webs, blogs, “me gusta”, fans, followers, etc. va surgiendo tímida pero con paso firme una vieja amiga… la emoción.

Ahora que parece que nuestra sed de conocimientos está siendo satisfecha de sobras, parece que se está abriendo paso algo que creíamos tan fundamental, pero al mismo tiempo, tan olvidado, como es la emoción, los sentimientos. Ahora les toca su turno.

Esta percepción ya hace días que me ronda en la cabeza, y de hecho, tenía muy claro que éste iba a ser el tema en torno al cual giraría mi nuevo post. Yo, la emoción, la estoy notando tanto en el tipo de contenidos que me leo a diario en la red, como en el tipo de contenidos que comparto y que cada vez son más valorados por la gente que me sigue (a todos vosotros, Th@nk U so much!). En mi página de Facebook así como en Twitter (@Srubies), aparte de las publicaciones típicamente “marketinianas” o de naturaleza 2.0, últimamente me estoy aficionando a exponer posts y a citar frases célebres (o no tanto) que invitan a la reflexión, a la introspección, al análisis de los sentimientos…  y curiosamente, este tipo de frases o de posts son los más comentados, los más valorados y los más compartidos. Curioso decía… y a la vez hermoso.

Las personas somos lo que somos, personas, y los sentimientos forman una parte inequívoca de nuestra naturaleza. Una vez superada la fase de compatrir información, ahora queremos compartir sentimientos, sentirnos cerca los unos de los otros, sentir que conectamos, que somos escuchados por lo que somos y lo que sentimos más que por lo que decimos… Quizás era una evolución lógica, la de pasar de compartir información pura y dura a compartir sentimientos, quizás en esta difícil época de crisis y de valores defraudados lo necesitábamos más que nunca: sentirnos arropados, sentir que al menos no estamos solos, que todos pasamos "más o menos" por lo mismo, sentirnos comprendidos… Quizás (seguramente) lo sea todo.

Curiosamente, el otro día leía un post que hablaba de todo esto, El movimiento “slow internet” y la era de las emociones que están por llegar. en el que se afirmaba que estamos atravesando por la tercera fase, la emocional, después de la sociedad de la comodidad y de la información. Comentaba lo siguiente:
La nueva era, la era de la emoción, se centra en nosotros y en nuestras vidas. En apreciar los momentos, en conectar con las cosas que nos hacen sentir bien y compartirlas con las personas que pueden apreciarlas y disfrutarlas. No se trata de cuanto se consume o cuántos cientos de amigos se acumulan, sino de vivir de forma única nuestra experiencia vital. En definitiva: calidad, felicidad y emociones.
Bien, parece que no soy la única que se ha dado cuenta de ello. Y me alegro. Demos pues, rienda suelta a nuestras emociones, y hagamos que las relaciones con los demás no sean únicamente informativas, sino que mostremos también un poquito de nuestro corazón.

Para finalizar os dejo, como no, con una de mis citas favoritas:

“Una buena vida es aquella inspirada por el amor y guiada por la inteligencia.” (Bertrand Russel)

¿Qué opinan vuestras emociones? ;)

jueves, 1 de diciembre de 2011

Las Redes Sociales y la máquina del cafe.

Que las Redes Sociales forman parte de nuestra realidad social y empresarial es algo que ya (casi) nadie se cuestiona. Sin embargo, la rentabilidad que las Redes Sociales aportan a las empresas ya es harina de otro costal.

Mucho se ha debatido (y sigue debatiéndose) sobre este tema. ¿Es rentable para una empresa estar en las redes sociales? Las que están presentes ¿realmente ganan dinero?,  y ¿cómo se puede medir esta rentabilidad?... En definitiva, ¿cuánto se puede ganar gracias a las Redes Sociales?

Bien, lo primero que debemos tener en cuenta, es que la rentabilidad que se pueda conseguir gracias a la Redes Sociales (y al Social Media en general) no será, ni mucho menos, a corto plazo. Estar presente en las redes sociales exige constancia, disciplina y mucha, mucha paciencia…

Primero, porque se debe alcanzar una masa crítica de fans, followers, seguidores, o como queramos llamar a los usuarios, admiradores o simpatizantes de nuestra empresa, marca o producto. De este modo, las acciones que emprendamos en las redes podrán llegar a tener un impacto significativo. Sin audiencia, no hay función que valga.

Otro aspecto a destacar es la calidad de esta audiencia. Es de vital importancia que los usuarios que hayan sido atraídos por la empresa o marca en cuestión, sean realmente receptivos y activos con ella. Y de eso va a depender la calidad de las acciones o interacciones que generemos con ellos. Llega un punto en que la cantidad no es tan importante como la calidad. Por muchos followers que tengamos, si no obtenemos ninguna respuesta o reacción por parte de ellos, significará que no se están haciendo las acciones adecuadas. La generación de respuestas, comentarios, interacciones, etc. debe ser una constante; porque de eso va todo esto de las Redes Sociales, de interactuar.

Cuanta más interacción, más conversación; cuanta más conversación, más relación… y cuanta más relación, mayor fidelización. Y ahí es donde reside el verdadero secreto de la rentabilidad de las Redes Sociales, en la fidelidad. Y no sólo me estoy refiriendo a la fidelidad de las empresas/marcas para con sus consumidores o clientes, sino también a la fidelidad interna de los trabajadores de una misma empresa. Las redes sociales son el medio que facilitan la verdadera interrelación entre las las personas, estén donde estén.

En referencia a esto, hace unos días leía una estupenda entrevista en “La Contra” de La Vanguardia a Charlene Li, considerada para muchos como una de las grandes gurús de las redes sociales. En la entrevista, se le preguntaba a Charlene sobre si las Redes Sociales generen o no dinero, a lo que ella respondía:

"¿Gana dinero una máquina de café en una empresa? Lo hemos demostrado. El café aumenta la atención y la concentración en el trabajo, pero además crea relaciones en torno a la máquina. Esas relaciones –no todo se mide por el sueldo– acaban por identificar más a un empleado con su trabajo y lo retendrán. Lo que mantiene fiel a alguien a su empresa son las relaciones que tiene en ella".

Creo que la respuesta es sencillamente fantástica. Más claro el agua.

Las Redes Sociales, al igual que la máquina de café de una empresa, generan relaciones, tanto a nivel interno (entre los empleados) como externo (con los consumidores). El fomentar las relaciones entre si y hacia la empresa, hace que las personas se sientan a gusto, motivadas, identificadas y comprometidas; hace que éstas sienten que forman parte de un equipo, que son escuchadas, que sus ideas son tomadas en cuenta, que se sientan importantes. Y con todo ello, la empresa ya los habrá ganado y con ellos, ella habrá ganado, para siempre (o al menos, durante mucho tiempo, si sabe seguir escuchándolos e interactuando con ellos). ¿Acaso existe una mejor forma de fidelización? Y la fidelización ¿no es una de las mejores variables para medir la rentbailidad? Tampoco me quiero extender en la medición de la fidelización, pero ya es harto conocida la famosa frase que reza: "fidelizar a un cliente es 5 veces más rentable que captar a uno nuevo". Con esto ya se dice todo, o mucho.


Pero además, las Redes Sociales, son capaces de ofrecer otros muchos beneficios, tal y como comentaba en un anterior post anterior mío: “10 razones que explican porqué lo 2.0 llegó para quedarse”: su gran poder de alcance y a la vez, de segmentación de la audiencia, el fomento de la participación, de la credibilidad, de la creatividad, alto nivel de medición, gran nivel de ahorro,… Todo un mundo de ventajas, si, pero sin duda me quedo con una: la de la interacción con las personas. Si ésta existe y es buena, no hay duda, la redes sociales son rentables; mucho más de lo que podamos imaginar.

Llegados a este punto, ¿todavía hay alguien que dude de la Rentabilidad de estar en las Redes Sociales? ¿Qué os parece si nos tomamos un café mientras lo discutimos? :) 

sábado, 15 de octubre de 2011

¿Es cosa del destino o del 2.0?

Hace unas semanas, concretamente el pasado 27 de Septiembre, tuvo lugar la ceremonia de entrega de las titulaciones de las primeras promociones de Inesdi Barcelona (Instituto de la Innovación Digital de las Profesiones; www.inesdi.com). Tres flamantes promociones (una en “Marketing Digital y Redes Sociales” y dos en “Community Management y Redes Sociales") nos dimos cita en las instalaciones del centro para recibir ¡por fin! el tan ansiado y también tan merecido título.

Yo tuve, además, la suerte y el privilegio de ser elegida para pronunciar un pequeño discurso que representara mi experiencia como alumna. Pues bien, aquí os dejo mis palabras, sinceras y emocionadas:

“Bona tarda a tothom. Buenas tardes a todos.

La verdad es que estoy realmente orgullosa y satisfecha de poder decir que pertenezco a la primera promoción del programa de Marketing Digital y Redes Sociales de Inesdi (Barcelona). La primera de la que estoy segura, serán muchas más. No me cabe ninguna duda.

Inesdi, no solamente ha sido una de las escuelas pioneras a nivel nacional en creer firmemente y potenciar el desarrollo de las profesiones 2.0, sino que además ha demostrado saber hacerlo. No era una tarea fácil, puesto que empezar desde cero en este tipo de materias, y sin ningún tipo de precedentes, es algo que muy pocos se atrevieron a hacer en ese momento. Aquí se ha conseguido y con buena nota. No solamente por todo lo que hemos aprendido, que ha sido mucho y de gran calidad, sino por el alto nivel de los profesores, y por la gran atención, minuciosidad y profesionalidad de todo el equipo organizativo que ha hecho que hoy estemos aquí todos. Porque creedme, para ellos lo más importante, en todo momento, hemos sido nosotros. Y puedo dar buena fe de ello, puesto que además he tenido el gran placer de colaborar con Inesdi como coordinadora académica, contactando con los profesores, coordinando los diferentes temarios, recogiendo el feedback de los alumnos en cada una de las clases, etc.

Y aunque estoy segura de que Inesdi se va a seguir superando y mejorando año tras año, promoción tras promoción, nosotros podremos decir bien alto y claro que fuimos los primeros. Los que marcamos la diferencia, los que nos atrevimos a dar un paso hacia delante cuando muchos todavía tenían dudas. Los que ya estamos un paso por delante, los que tenemos más oportunidades que nunca, los que tenemos ante nosotros un amplio universo por explorar y para encontrar la profesión de nuestras vidas.

Muchos de vosotros ya habréis encontrado este trabajo, otros todavía lo estaréis buscando. Sea como sea, estoy convencida de que tarde o temprano daremos todos con él, y sin duda alguna, lo que nos ha aportado Inesdi va a ser determinante para ello.

Además, yo soy de las que cree que las cosas no pasan porque si, sino porque tiene un sentido, porque nosotros hacemos que las coses pasen. Por eso, no creo que fuera casualidad que un cierto día de enero de este año viera un anuncio de Inesdi navegando por Internet y que ahora, justamente ahora, esté aquí. 

Y me gustaría explicaros porqué os digo esto. Sin ir muy lejos, os voy a contar mi propio caso:


Al finalizar este curso, en Julio de este año, yo estaba decidida a seguir trabajando por mi cuenta como consultora en temas de marketing y gestión empresarial y añadir la “capa digital” o 2.0 entre mis servicios.

Sin embargo, mi futuro profesional acaba de dar un vuelco inesperado. De repente, todos mis planes  han cambiado. En contra de todo pronóstico, he acabado yendo a la empresa familiar, la misma con la que nunca pensé que tendría algo que ver. Dejadme que os explique.

Se trata de una pequeña empresa familiar (una PYME) que se dedica a un tema muy técnico y de tipo industrial, relacionado con el sector de la automoción; algo que jamás me había interesado, la verdad. El ámbito del negocio siempre había sido local y nunca me planteé entrar a formar parte de él.

Pero todo cambió cuando este verano en la empresa decidieron hacer una página web, por eso de “estar un poco al día”. Al final, la página resultó estar muy bien hecha, contando con un excelente posicionamiento SEO, lo cual le permitió aparecer en las primeras posiciones de los buscadores, en la mayoría de las búsquedas relacionadas con el sector. Gracias a ello, las consultas y los pedidos procedentes de diversas partes del mundo no se hicieron esperar. Y ahí todo cambió. Se puede hablar de un antes y un después en la historia de esta empresa, y todo ha sido gracias a Internet, a la web 2.0. 

Las grandes oportunidades que brinda el universo 2.0 ha hecho posible que una PYME de provincia se haya abierto al mundo y el mundo se haya conectado con ella. Y de ahí, las oportunidades de negocio se han multiplicado de forma exponencial. Me resulta algo maravilloso y más aún viniendo de la empresa de mi familia. Pero además, la web 2.0 ha hecho posible que yo, finalmente, formara parte de este negocio, el que mismo abrió mi abuelo hace más de cincuenta de años, el mismo que ha hecho prosperar mi padre con todo el sudor y horas, días y años de mucha dedicación. Y ahora yo voy a continuar el trabajo empezado, aportando todo mis conocimientos, experiencia, ganas e ilusión. Y eso me resulta todavía más maravilloso.

Probablemente, si yo no hubiera estudiado en Inesdi y conocido todas las posibilidades que el mundo digital es capaz de ofrecer, seguiría sintiéndome indiferente al negocio, quien sabe. Pero mis conocimientos y las posibilidades que éstos me han brindado, me han hecho ser consciente de todo lo que ya está pasando ahora en la empresa, de todo lo se puede realizar a partir de ahora y de todo lo que soy capaz de aportar.

Y de ahí que os hablara del destino, de las casualidades que se presentan en la vida.. son por algo; las cosas no pasan por casualidad. Este era el momento de estudiar y ahora es el momento de aplicarlo. Inesdi ha sido el facilitador. Ahora le veo el sentido.

De todos modos, aunque mi dedicación a la empresa ahora es plena, no voy a dejar de lado mi blog, ni mi Twitter ni mi página de Facebook, porque estos ya forman parte de mi vida, de mi día a día. El universo 2.0 es mi gran pasión. Y sin Inesdi probablemente esto tampoco seria así.

Ahora es nuestro momento. Nosotros hemos sido los primeros por algo; estamos aquí y ahora por algo; de eso estoy segura. Busquemos ese "algo" o permanezcamos muy atentos y dejemos que ese "algo" nos encuentre a nosotros. Las oportunidades están ahí, más cerca que nunca y somos nosotros los que ahora tenemos la capacidad de verlas y aprovecharlas. Y si no, de aquí  a un tiempo hablamos y ya me contaréis.

Muchas gracias Inesdi y muchas gracias a todos vosotros."


Por cierto, la web de mi empresa ya está traducida a seis idiomas y la podéis ver en: www.rufre.com

miércoles, 3 de agosto de 2011

Vacaciones 2.0

Principios de Agosto, vacaciones en la playa, tres estupendas semanas por delante perfectamente planificadas para no hacer absolutamente nada. Sólo disfrutar del mar, del sol, de largas siestas, de la buena comida y del merecido descanso en compañía de mi familia y los amigos. ¡Cuánto tiempo esperando a que llegara este momento!

Me juré y perjuré una y otra vez que me dejaría el portátil en casa, porque sí, porque estaba cansada de pasarme horas y horas, día tras día, delante de él... porque quería perderlo de vista por una temporada y sobretodo, porque quería “desconectar” en el más estricto sentido de la palabra. Ni e-mails, ni Facebook, ni Twitter, ni Blog,…¡nada! quería desaparecer digitalmente por tres semanas. Hasta se me pasó por la cabeza dejarme también el móvil/smartphone… pero entonces me di cuenta de que sin él no podría hacer llamadas (sobretodo por si hubiera alguna emergencia, claro está) y eso, tal vez, ya era demasiado “desaparecer”.

Una vez hechas las maletas, me puse el móvil en el bolso (junto con el cargador, ¡importante! si no, estamos en las mismas) y antes de abrir la puerta, bártulos en mano, para salir pitando y no volver en casi un mes, doy un último vistazo alrededor. Y ahí estaba, encima de la mesa, cerrado, silencioso, solo, abandonado… No me lo pensé dos veces, metí el portátil en su bolsa (con la batería, ¡importante también!) y negando con la cabeza me lo colgué al hombro y entonces si, como pude (faltándome manos y pies) saqué todos los bultos de casa y cerré la puerta. Con llave, eso sí.

Y desde entonces. Aquí estoy, en la casa de la playa, con unas magníficas vistas al mar, con la agradable brisa acariciándome la cara y… con mis manos pegadas al teclado. Si, señores, si… ¡otra vez! Pero esto no es lo peor, sino el hecho de que es casi la una y media de la madrugada y, con un sueño que no puedo con él, aquí sigo, aporreando el teclado sin parar. Llamadme tozuda,  desobediente conmigo misma, débil, “masoca” o como queráis… no os va a faltar razón.

No tengo remedio, es algo superior a mi. Recientemente leí un artículo que hablaba sobre no se qué estudio que había llevado a cado una prestigiosa universidad de no sé donde… Total, que venía a decir que solamente un 5% de los usuarios son capaces de desconectar por vacaciones. El 95% restante seguimos “enganchados” a la red, a lo digital, o a todo lo que englobamos dentro del saco 2.0 o de la “nube”, como se dice ahora. Viéndome a mi, no me sorprende en absoluto.

Pues si, lo reconozco, yo soy una de esas personas enganchadas, una adicta a la red. En dos días de vacaciones que llevo no he parado de leer posts, blogs, mails, de twittear, de facebookear… y ¡mira! hasta estoy escribiendo un nuevo post para mi blog (que buena falta le hacía, por cierto, que ahora ya lo tenía un poco abandonado, pobrecito mío). Y no soy la única, puesto que Twitter sigue sacando humo, Facebook igual, no paro de interactuar con otros que están como yo (o quizás, peor), las entradas y los mails me llegan a decenas cada día… Ya lo dije en un tweet, intentando resumir el contenido de una noticia: En Agosto, todo se para, el mundo se va de vacaciones.... todo descansa, menos Internet”.

Si hace unos meses, afirmaba que Internet y las nuevas tecnologías están reñidas con el descanso, ahora lo ratificaría diciendo que también están reñidas con las vacaciones… ¿O no? 
La vedad es que Internet no esta reñida con nada, no nos engañemos, simplemente está ahí, por si queremos entrar en ella o no. Los que no paramos de reñimos con nosotros, somos nosotros mismos, incapaces de controlar nuestros impulsos y adicciones. Siempre pasa igual.

Definitivamente, debería haber dejado el ordenador en casa para no caer en la tentación, pero entonces no estarías leyendo este post, ni asintiendo con la cabeza, ni sonriendo, seguramente. Sólo por eso ya ha valido la pena romper mi juramento y seguir haciendo lo que más me gusta: seguir en contacto e interactuando con gente como tu.

¡Ah! y por supuesto, voy a encontrar tiempo de sobras para disfrutar del mar, del sol, de las largas siestas y del merecido descanso.



¿Qué vas a hacer tu? 


¡Que tengas un feliz verano, ya sea 2.0 o no!

martes, 21 de junio de 2011

10 razones que explican porqué el 2.0 llegó para quedarse.

Parece increíble que, a día de hoy, todavía haya gente que se pregunte si lo digital, lo online, o lo 2.0 no es más que una moda pasajera o un “bluff”.  

A mi me pasó el otro día, mientras estaba conversando con un amigo que se dedica a la publicidad offline. Él estaba buscando a alguien que le ayudara con algunas cuentas que empezaban a pedirle proyectos digitales. Pues bien, mientras yo le explicaba todo lo que se puede hacer con el Marketing Digital y el Social Media, veía como la expresión de su cara iba cambiando poco a poco. Finalmente, entre asombrado y preocupado, me soltó: “Buuffff… ya veo que me tendré que poner las pilas pero… ¿no crees que todo esto del “lo online” no es más que una moda pasajera?”

Mientras yo tampoco podía evitar mi cara de sorpresa e incredulidad, intenté explicarle algunas de las razones  por las que, a mi modo de ver, es más que evidente que el 2.0 llegó para quedarse; y no sólo eso, sino que además no va a parar de evolucionar. Pronto el 2.0 dará paso al 3.0 y suma y sigue... Más nos vale a todos que nos lo vayamos metiendo en la cabeza de una vez por todas y nos adaptemos si o si, y lo antes posible, a esta nueva realidad, si no queremos vernos totalmente "out" en poco tiempo.

Aquí las tenéis las razones que le expuse:

1. Llega a todo el mundo... o a quien queramos.
Nunca antes habíamos estado tan conectados con todo el mundo como ahora. Internet ha supuesto la gran  revolución de las últimas décadas a todos los niveles, no sólo económico, sino también informativo y ahora social.  Gracias a la red y a todas las herramientas y aplicaciones tecnológicas que tenemos a nuestra alcance, podemos ofrecer nuestros productos y servicios, informar, hablar e interactuar con cualquier persona situada en cualquier parte del globo. Además, la rapidez con que se mueven estos medios, hace que la difusión de los contenidos sea casi instantánea.

A diferencia de los medios offline, el alcance de los medios online es total y más directo. Además, también ofrece una mayor gestión de la audiencia, ya que se puede gestionar y acotar tanto como se desee. Gracias a técnicas como, por ejemplo, la geolocalización, podemos afinar nuestro alcance y dirigirnos a aquellas personas ubicadas en sitios determinados, según nuestros intereses.


2. Ofrece una mejor segmentación
Pero los medios digitales no sólo permiten la segmentación de los usuarios en torno a su ubicación física, sino que permiten segmentarlos en base a cualquier variable que nos interese medir: aspectos  socioeconómicos, comportamientos de compra, gustos, aficiones, etc.. Como ya veremos más adelante, los medios sociales proporcionan una gran cantidad de información y de ahí, una de las grandes ventajas que ofrecen, es la medición "casi" absoluta de todo.

3. Es más democrático
La web 2.0 es la web de las conversaciones. Ahora todo el mundo puede hablar, expresar su opinión, debatir y discutir sobre todos los temas que desee. ¿Cuando antes había sido esto posible? Esta gran ventaja, para mi una de las más importantes, supone no sólo una gran vía que tienen las empresas de conocer más y mejor a sus consumidores sino también un excelente forma de acercarse a ellos y establecer una estrecha relación. Ahora todo el mundo puede participar; a la gente le gusta ser tenida en cuenta, quiere ser escuchada... Cualquier marca que se preste a dedicar a sus consumidores un poquito de atención, tendrá mucho terreno ganado.


4. Tiene mayor credibilidiad 
Los medios online gozan de una mayor credibilidad que los offline porque los contenidos, comentarios, recomendaciones, sugerencias, opiniones, etc. son generados por los propios usuarios, y no solamente por las marcas. Cuántas veces nos hemos puesto en blogs y foros para conocer las opiniones de los demás en torno a cualquier producto o servicio en el que estamos interesados. Si una persona, y más aún si la conoces, te recomienda este u otro producto y te "canta" sus bondades, seguro que te lo vas a creer mucho mas que si viene la marca y empieza a bombardearte con anuncios repetitivos, que pueden llegar incluso a generar rechazo.

5. Es más económico
El Social Media está al alcance de cualquiera que tenga conexión a Internet. Ahora, ya no hace falta ser una multinacional  ni contar con grandes presupuestos para darse a conocer y llegar a los clientes potenciales. Con un presupuesto relativamente reducido, se puede disponer de una página web o de un blog y ¡zas! estar en el gran escaparate digital. Las altas barreras de entrada que suponen los medios convencionales, al tener que contar con una inversión mínima necesaria, se ven claramente reducidas por la gran accesibilidad que suponen los medios online. Todo el mundo puede estar en Internet y quien no está es porque no quiere. Ahora bien, si se está, se debe hacer bien (pero esto ya sería otro tema de debate... mejor lo dejamos para otro post).
Además, no debemos olvidar el gran ahorro en costes que suponen los medios online, como por ejemplo en estudios de mercado, gracias la gran cantidad de información almacenada a partir de las bases de datos que se van genetando y alimentado de forma automática, directa y fidedigna.

6. Es más creativo
Basta con que pensemos en la gran cantidad de herramientas digitales que tenemos a nuestro alcance: redes sociales, blogs, video sites, wikis, microblogging, photos, forums, podcasting y un largo etcétera, para darnos cuenta de la gran diversidad de formas y maneras que tenemos de expresarnos en los medios online. Todo ello conforma el Social Media y aquí la creatividad parece no tener fin. Diseños web, infografías, vídeos virales, juegos interactivos,... Cada día nos sorprende ver nuevas, divertidas y entretenidas formas de hacer llegar nuestros mensajes a la audiencia. Algunos ejemplos de grandes creatividades online: AXE, Angry Birds, DIESEL, Estrella Galicia, Tippex, ...

7. Es totalmente medible
Esta es otra de la grandes ventajas que ofrece el Social Media, sobretodo para "venderlo" a nuestros clientes o jefes. En la red todo, absolutamente todo (o casi todo), se puede medir. Desde el número de clicks que se hace en nuestra página web, hasta el tiempo medio que se pasa en ella, pasando por conocer lo que se dice de nuestra marca, las tendencias de un determinado sector... ¡por no hablar de los perfiles e información acerca de nuestros usuarios!. Todo lo que pasa en la red, se queda "grabado" en ella y por eso, todo se puede monitorizar y analizar. Basta con dominar las herramientas de medición más apropiadas para cada caso: medición web, monitorización y gestión de la reputación online, análisis bases de datos de usuarios, análisis gráficos y comparativas, métricas para medir las redes sociales, medición de ROI y resultados, etc.

8. Genera más oportunidades de negocio
Con el incremento del uso las redes sociales, se multiplican el número de canales con los que llegar a la audiencia, y además, en el momento adecuado. Con la proliferación de los foros i los blogs, por ejemplo, una determinada marca o producto puede aparecer a la vista del usuario justo en el momento en que está buscando información al respecto. De ahí que pueda surgir una venta y, además, gracias a la diversidad de opiniones y conversaciones que se generan, pueden aparecer nuevas oportunidades de negocio como la creación de nuevos productos o la incorporación de mejoras en los existentes.


Además, y como ya se ha apuntado más arriba, gracias a la monitorización y seguimiento de la información en la red, se mejora considerablemente el conocimiento y la opinión de las marcas y productos por parte de los consumidores, así como de sus comportamientos y gustos. Todo ello hace que se afinen mucho más las estrategias en Marketing Digital i los Planes en Social Media, multiplicando mucho más las oportunidades de generar ventas. 


9. Conecta emocionalmente
Los usuarios y/o consumidores que comparten los mismos intereses e interactúan entre si en la red, acaban formando parte de un mismo grupo, formando así una comunidad virtual. Eso fomenta el sentimiento de pertenencia al grupo y no hace otra cosa que incrementar su afición por la marca, producto o tema en cuestión. De ahí que haya surgido la tan famosa (y también "polémica") figura del Community Manager, o el responsable de comunidad, que no es otra que la persona encargada de crear, gestionar, moderar y dinamizar una comunidad de usuarios en Internet, con independencia de la plataforma digital que utilicen. 


Dentro de las comunidades virtuales, es muy importante poder detectar a los principales "fans" o también denominados "embajadores", ya que son personas gozan de una gran capacidad influenciadora dentro del grupo y sus opiniones tiene un gran peso. Por eso, cuanto más cerca puedan estar las marcas de ellos y hacer que hablen positivamente de ellas, mucho mejor.

10. Nos hace mejores 
En este apartado me gustaría explicar dos ideas: la primera tiene que ver con un tema puramente de gestión de empresa y el segundo es mucho más emocional.


Referente a la primera idea, determinadas plataformas online, como por ejemplo Twitter, se pueden perfilar como un canal directo de comunicación con los usuarios, llegándose a convertir incluso en un centro de atención al cliente. La inmediatez de estos medios permite detectar y solucionar determinadas quejas o problemas y a la vez que hacen posible gestionar posibles crisis de manera más efectiva.


Por último, todas las personas y empresas que interactuamos en la red, nos regimos por los denominados valores 2.0 que no son otros que el respeto, la generosidad, la reciprocidad, la apertura, la colaboración y la honestidad. La constante interacción con los demás hace que lo mejor de cada uno de nosotros salga a relucir, porque tenemos la gran oportunidad de ser auténticos, y eso mismo es lo que los todos demás buscan y esperan encontrar. Los que actúan fraudulenta o maliciosamente (también denominados "trolls") poco a poco van a ir siendo apartados y expulsados de las comunidades, redes sociales, etc. porque como hemos apuntado, la red tiene una gran memoria, todo queda anotado y al final todo se sabe y se difunde rápidamente. Es decir, al final todo cae por su propio peso.



Bien, espero haber dado motivos más que suficientes para demostrar que los medios online no solamente han llegado, sino que se van a quedar y a evolucionar. Con todo esto no quiero insinuar que los medios tradicionales u offline sean inefectivos o vayan a desaparecer, ¡ni mucho menos! (o no al menos, en el corto/medio plazo). Pero un hecho real es que la balanza de las inversiones en medios se esta decantando más hacia lo online y algo menos a lo offline. Será porque muchas empresas ya se están dando cuenta de los beneficios que aporta la web 2.0. Al final, y según las estrategias de cada empresa, un buena combinación de ambos medios puede ser la fórmula adecuada.

Seguramente todavía me dejo muchas más razones en el tintero, pero no tengo duda de que acabé convenciendo a mi amigo. Al final, y para acabar de tranquilizare le dije: “No te preocupes, donde no llegues tu, allí estaré yo”.